— Es increíble la irresponsabilidad que acabamos de escuchar y además poder constatar que nos miente en la cara. Somos un pueblo con una cultura, con una tradición y el orden siempre ha estado presente. La invitación que nos hace acá va simplemente en contra de lo que somos. Acaso usted, ¿no reconoce esto?
— Pero miren la facilidad con la que se me caricaturiza de mentiroso, sin presentar un solo argumento. Yo reconozco que el orden es una de nuestras tradiciones y yo la defiendo, es por eso mismo que le estoy indicando de manera honesta, que lo que de la izquierda es, es de la izquierda y no al revés, como usted nos quiere convencer. Es de público conocimiento que eso siempre ha sido y va a ser de izquierda y no entiendo cómo usted puede plantear lo contrario, muestre algún estudio, alguna investigación que lo acredite.
— Bueno para darle un poco más de seriedad a la discusión, acá le tengo un dato, mire la gráfica, acá se puede ver con claridad y con datos de la prestigiosa Universidad de Chicago que el orden, es exactamente el que le estoy planteando, acá en este otro estudio de la universidad de…
— Pero de dónde salió eso? ¡Eso es mentira! ¡Por favor!, ¿Cuándo la Universidad de Chicago hizo ese estudio? Esto ya carece de toda seriedad. ¡Datos inventados!
— ¿Me va a dejar terminar mi intervención? Luego me replica, por favor un poco más de respeto.
— Pero es que esto es demasiado, estos antecedentes son falsos…
— ¿Me va a dejar terminar?
— Ok, disculpe. Continúe por favor.
— Ahora usted me trata de mentiroso a mí, insólito, al final usted cree lo que quiere y si el dato no le sirve entonces lo califica de mentira. ¡Qué poca seriedad!, debería darle vergüenza. Bueno, como les indicaba, además tengo este otro estudio de la UCLA que como pueden ver se confirma lo mismo, a la derecha va lo que todos siempre hemos sabido y obviamente a la izquierda lo opuesto.
— Ya que quiere antecedentes, mire estas imágenes. Mire lo que hace a la izquierda, en esta otra imagen, mire, ¿qué ve? Y en esta otra imagen, esa es la realidad, no sus estudios, son familias, familias reales, de gente de bien, que han mantenido una tradición y dejan a la derecha lo que corresponde. ¿Quiere más ejemplos? Es evidente y con esto cierro, que nuestra tradición ha sido siempre dejar a la derecha los elementos que jamás se han podido resolver con la izquierda.
— Me gustaría que respondiera por qué la semana pasada lo corrigieron cuando esta…
— ¡Niños!, ¿Ya pusieron la mesa?
